





En la partida de esta semana teníamos que acudir al baile del rey de Castilla (interpretado por el "afectado" Leonardo DiCaprio).

En el susodicho encuentro ocioso debíamos conseguir un colgante de su majestad. Parece complicado ¿verdad? Ja, ni la mitad de lo que íbamos a complicarlo nosotros ñiajajaja.
Y es que en lugar de hacer el típico choque fortuito "pum-perdone-hastaluego" durante el baile, nuestra querida espadachina vodaccia decidió usar su par de encantos para llevarse al rey a un aparte.
No contábamos con el jugetón apetito sexual de su majestad y su maestría con el "sable", que nos proporcionaron una de las escenas más surrealistas y (para sufrimiento de Laura) más inolvidables de la campaña, con LDC corriendo en plan jijiji tras las enaguas de nuestra conpañera.

Mientras tanto, en el exterior, se mascaba la tragedia, cuando la temible pirata Roberts irrumpía en el lugar, tras haber capturado a mi personaje y a nuestro compeñero eiseno, buscando a nuestra compañera debido a los múltiples malentendidos que su parecido físico había provocado a lo largo de nuestras aventuras y que, según ella, afectaban a su reputación.
Clink, clank, y leches por todas partes, con piratas y héroes cayendo a los fosos por igual, fosos en los cuales nadaba nuestra femme fatale cual feliz ornitorrinco arrastrado al fondo por el peso de sus espadas.
Es ahí cuando mi personaje decidió que llevaba mucho tiempo sin bañarse y procedió a rescatar a sus compañeros a medida que éstos caían.
maldito LDC ¬¬
ResponderEliminarMiles de monedas de oro me he gastado en psicólogos y no consigo superar el trauma de esa escena.
ResponderEliminarPues decídmelo a mí, que lo sufrí en mis propias carnes XD
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